miércoles, 20 de julio de 2011

Los amigos, esos ángeles que Dios va cruzando en nuestro camino...


“La amistad es un alma que habita en dos cuerpos; un corazón que habita en dos almas”. Aristóteles (384 AC-322 AC) Filósofo griego.

“La amistad duplica las alegrías y divide las angustias por la mitad”.
Sir Francis Bacon (1561-1626) Filósofo y estadista británico.


 Hoy 20 de Julio se celebra el Día del Amigo en Argentina, y como había estado escribiendo sobre este tema, me parece una buena ocasión para compartir algunas reflexiones.
Aunque se haya escrito tanto sobre el mismo, no deja de sorprenderme ese encuentro de almas que cada tanto nos ocurre, esa coincidencia profunda que viene desde el fondo de los tiempos, el percibir que el otro comparte tus valores y puntos de vista. Y eso lo percibimos en los primeros minutos de un encuentro, luego lo vamos confirmando, intercambiamos pensamientos, ideas, opiniones, pero hay un encuentro natural, un reconocimiento de alguien que nos refleja.

Asimismo, según diferentes estudios científicos, tener amigos es fundamental para tener una vida más saludable, para reducir el stress y como terapia, “las relaciones sociales son la medicina más barata a nuestro alcance" sostiene Juan Francisco Delgado en el blog “Psicología: Ayuda a las personas”. http://www.ayuda-psicologica.info/2009/06/la-amistad-claves-para-entenderla-y.html (La amistad: claves para entenderla y mejorarla).
Y aquí encuentro coincidencias entre este análisis psicológico y lo que sostiene Martin Seligman, el mayor impulsor de la psicología positiva, acerca de la importancia del compromiso con los demás. Delgado dice que “cuando hacemos algo por la otra persona, no es el valor de lo que hacemos lo que cuenta o el trabajo que te cuesta hacerlo, sino lo a gusto que nos sentimos haciéndolo”. Y Martin Seligman habla de la búsqueda de la felicidad y dice que para tratar de entender ese concepto tan difuso, habría que considerar tres aspectos: la vida agradable, la vida comprometida y la vida con significado. Y es en el compromiso y en la búsqueda de significado donde las relaciones con los otros cobran total sentido. Ya que cuando compartimos con los demás, crecemos como personas. Vale la pena leer esta entrevista que le hizo Eduardo Punset a Martin Seligman.




Quiero compartir una canción del gran cantante y poeta Alberto Cortez:
“A mis amigos” de Alberto Cortéz

Y finalizo con un poema que escribí en mi adolescencia, y que a pesar de su candor, tiene la esencia de lo que significa para mí la amistad:

 
Dile a Dios

Si amistad es entregarse día a día
esperando una sonrisa, y nada más,
si es verter en otro vaso la alegría
sin salpicar con ello a los demás.

Si es confiar esperanzas y pesares
sin temor a una sarcástica opinión;
si es compartir los viajes por los mares
en azules barcos de ilusión.

Si es correr al encuentro de la vida
sin la sombra de la eterna soledad;
si es tener quien te levante en la caída
brindándote un apoyo de verdad.

Si es creer en la mano que se tiende
y escuchar la palabra que se dá;
si es lograr la sonrisa que se enciende
y ahuyentar el dolor de donde está.

Entonces sí, con el alma en la mirada,
y en la voz una tibia claridad,
entonces sí, dile a Dios que en tu morada
se ha posado el sol de la amistad.

4 comentarios:

  1. La amistad es un sentimiento muy complicado, en mi opinión, si no el que más. Uno a veces cree temerla de alguien hasta que un mal día, o bueno según se mire, descubre la "farsa" que ocultaba ese supuesto sentimiento. Siempre se dice que un amigo es esa persona que está contigo incluso en los malos momentos. Incluso. Es decir que también en los buenos ha de estar, y eso a veces se olvida pese a ser muy importante. De hecho si un gran amigo, aunque sea uno el único al que puedes considerar así, está contigo en los buenos momentos, es difícil que caigas en alguno malo. En mi experiencia personal, he conocido gente que ha estado ahí en los buenos momentos, y nunca aparece en los malos, gente que ha estado siempre en los malos, pero nunca en los buenos aunque se les necesitase, y luego, he conocido amigos.
    Un amigo no solo te pasa la mano por el hombro cuando lloras, ni tan siquiera es el que llora contigo. Es el que llora cuando lo haces tú porque sea cual sea el motivo, le afecta tanto como a ti. Un amigo es quien se pasa las noches en vela sólo porque sabe que estás triste, y aunque ni tan siquiera pueda estar a tu lado, físicamente, su cabeza no puede tomarse un descanso hasta que halle la manera de hacerte sentir bien. Un amigo no es una persona con la que vivimos, es una persona PARA la que vivimos, es a quien dedicaremos todo el tiempo, esfuerzo, dinero, sudor y lágrimas que sea necesario.

    Me ha encantado la cita de Juan Francisco Delgado y creo que nadie le puede quitar la razón en eso...
    Y por supuesto me ha encantado la entrada, ya tenía ganas de ver una nueva en tu blog!

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  2. Mail de Alberto Tezza:
    Hola Georgina, como no pude meter mi comentario en tu Nota sobre los amigos de tu Blog (me rebota) te lo envío por esta vía al pié. Un saludo afectuoso. Alberto

    En ésta sociedad evolucionada donde la comunicación entre personas deja que desear, veo a la amistad como la joya de la corona que nos genera mayores alegrías y buenos momentos…. y buena terapia!!! . Encontramos en nuestros amigos vínculos de profundidad afectiva, mayor confianza y sintonía superando el hola-chau del día a día. Qué buen refugio! Qué bueno compartir mesa entre amigos!, pero no aquella amistad ideal que en frases célebres nos convocan los grandes pensadores, sino de amistad variada y con diferentes grados de profundidad. No única ni igual en todos los casos, sino diversa y plural, importantes todas, que tolera y respeta, admite y aprecia lo diferente no sólo en opiniones sino hasta en determinados valores de mayor calado, sean culturales, religiosos, etc . Amistad al alcance de todos como fuente de felicidad y no imposibles sublimes y divinos. Bueno, en esa dirección quería opinar aunque las tan variadas circunstancias y el tiempo tendrán reservas en el baúl de los tesoros para los “incunables” por su valor especial, que todos tenemos. Y lo más bonito: sabemos que hay plazas libres para la amistad y a la espera que sólo el tiempo adjudica en éste mundo difícil de adultos más reservado y complejo. Me decía un amigo…la amistad (de los “incunables”) hay que trabajarla, recordando el cuento del Bambú japonés.
    Tu cita de Seligman me resulta interesante, hablando ya de otras cosas. El compromiso: consigo mismo, ser uno mismo, ser auténtico, respetarse, lealtad con uno mismo como primera condición, sin lo cual difícilmente podríamos respetar a los demás. Si creemos en nuestras opiniones y valores y lo respetamos y actuamos con lealtad, seremos íntegros y consistentes. Por condición humana deberíamos dar el mismo valor al otro justamente porque creemos en nosotros mismos como igual a otro, lo que no significa dar razón. Se refiere también a vida con sentido o significado. Lo creo vinculado a lo anterior, al compromiso, pero lo trasciende y supera. Trascender la individualidad da sentido a nuestras vidas. Más o menos. Tú mismo/a. El común de los mortales lo tiene cerca, muy cerca: lo encontramos en nuestras familias, nuestros hijos, el trabajo, la responsabilidad, el otro.
    Claro que hay otras cosas y no conceptos fijos ni compartimentos estancos, somos mucho más, qué bueno! La inteligencia. El pensamiento. El pensamiento como clave y fuente de felicidad, también al alcance de todos!!!. No la felicidad sublime y divina, no existe. La vida misma, es que si no, la sublime y divina no es más que fuente de infelicidad, por inalcanzable y teórica. Pero claro, queremos lo imposible…
    El mundo está loco…NO! El ser humano… es extraordinario!. (La colifata). Gracias Georgina por compartir.

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  3. Queridos Facundo y Alberto: muchas gracias por vuestros comentarios que enriquecen el blog!. Coincido con ustedes en que a la amistad hay que trabajarla, nos demanda energía, preocuparnos por los otros, salir afuera de nosotros mismos, tender una mano, poner el oído y hacer algo por los otros. "En la pobreza y demás infortunios de la vida, los amigos verdaderos son un refugio seguro. Ellos librarán a los jóvenes de sus imprudencias, serán consuelo y auxilio para los ancianos en su debilidad y motivarán a los adultos a realizar sus obras más nobles", Aristóteles.
    Y en cuanto a lo que comenta Alberto de la vida con compromiso, Séneca dijo: "Ningún hombre puede vivir feliz si sólo se interesa en sí mismo y trata de tener la ventaja en todo. Debes vivir para los demás si quieres vivir para tí mismo".
    Gracias por vuestra amistad!!!!!!

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